Desde el año pasado la revista literaria virtual No Retornable comenzó a implementar dossiers temáticos. El resultado fue una recopilación de artículos de escritores con procedencia diversa, cuyas voces entraron en tensión e incluso llegaron a contradecirse entre sí. La política editorial de la revista permite e incentiva esta pluralidad con la idea de que cada lector pueda encontrar distintas perspectivas que aborden una misma temática.
En la nota publicada en la sección www.cultura.eñe se concluye luego de un paneo a vuelo de pájaro que la revista "mantiene el tono amable de un siglo en donde los jóvenes honraban a los mayores sin mayores cuestionamientos", y luego, al comentar el último dossier sobre cine y literatura dice que allí "se destacan los nombres de Elvio E. Gandolfo, Graciela Speranza y Gonzalo Aguilar". Dicho dossier, al igual que el de traducciones y el de mercado editorial, está compuesto por más de diez autores, muchos de los cuales hacen cuestionamientos a los modelos canónicos y proponen maneras alternativas de leer determinada situación. A los "nombres destacados" por un lector que solo repara en aquellos que poseen una trayectoria conocida y varias publicaciones, se suman autores que pertenecen a otros circuitos e incluso autores que publican por primera vez.
Ante una problemática hay múltiples lecturas, análisis y perspectivas; nosotros nos proponemos incluir la mayor cantidad de ellas que podamos. Publicar a escritores tan diversos, reunidos bajo una temática común preseleccionada, sin jerarquizarlos y dejar que sus textos discutan entre sí, es un cuestionamiento. Lo que cuestionamos en ese gesto es el derecho a un espacio de difusión para aquellos que tengan algo interesante que decir, no un currículum que sostenga su enunciación sólo con el grosor de sus páginas, ni una edad estipulada.
No Retornable intenta ser un campo de batalla al que no ingresen -por su posición- los soldados previamente coronados sino los que piensen que todavía es posible luchar y crean en las palabras. Evidentemente, el que hizo el comentario ya eligió su batalla y decidió bajarles el pulgar a los demás colaboradores. Entrar en un dossier sin ver más que tres "nombres destacados" y concluir por ese recorte que no hay cuestionamientos en la revista es confundir una operación de lectura con nuestra propuesta editorial.
En la nota publicada en la sección www.cultura.eñe se concluye luego de un paneo a vuelo de pájaro que la revista "mantiene el tono amable de un siglo en donde los jóvenes honraban a los mayores sin mayores cuestionamientos", y luego, al comentar el último dossier sobre cine y literatura dice que allí "se destacan los nombres de Elvio E. Gandolfo, Graciela Speranza y Gonzalo Aguilar". Dicho dossier, al igual que el de traducciones y el de mercado editorial, está compuesto por más de diez autores, muchos de los cuales hacen cuestionamientos a los modelos canónicos y proponen maneras alternativas de leer determinada situación. A los "nombres destacados" por un lector que solo repara en aquellos que poseen una trayectoria conocida y varias publicaciones, se suman autores que pertenecen a otros circuitos e incluso autores que publican por primera vez.
Ante una problemática hay múltiples lecturas, análisis y perspectivas; nosotros nos proponemos incluir la mayor cantidad de ellas que podamos. Publicar a escritores tan diversos, reunidos bajo una temática común preseleccionada, sin jerarquizarlos y dejar que sus textos discutan entre sí, es un cuestionamiento. Lo que cuestionamos en ese gesto es el derecho a un espacio de difusión para aquellos que tengan algo interesante que decir, no un currículum que sostenga su enunciación sólo con el grosor de sus páginas, ni una edad estipulada.
No Retornable intenta ser un campo de batalla al que no ingresen -por su posición- los soldados previamente coronados sino los que piensen que todavía es posible luchar y crean en las palabras. Evidentemente, el que hizo el comentario ya eligió su batalla y decidió bajarles el pulgar a los demás colaboradores. Entrar en un dossier sin ver más que tres "nombres destacados" y concluir por ese recorte que no hay cuestionamientos en la revista es confundir una operación de lectura con nuestra propuesta editorial.