Quizás sea esta la única solución. Hace un tiempo lo vi de casualidad cerca de mi casa y dije: voy a comprarlo. No lo hice y me arrepiento. Ayer pisé una baldosa floja y me empapé la media. Con el calor empezó a fermentar. Además la humedad me deja el pelo afro. Ahora pienso en un traje de astronauta. No sé por qué le tengo tanto odio si, al fin y al cabo, es solo agua. Pero basta, basta!!! Me deprime, me aburre, me moja y me cansa.
.
6 comentarios:
el maniquí a cuánto está? lo clavo acá para que atraiga mosquitos así puedo despertarme sin ronchas en los pies
Y parece que estos días seguirán así. El otro día, el de la tormenta, caminé por Talcahuano con el agua hasta casi las rodillas, impresionante... Gracias por visitar mi blog, me alegra que te haya gustado la foto de la Q. Un abrazo.
Para cuando la nueva no-retornable??
Espero no te hayas mojado mucho este fin de semana.
A un amigo se le llovía tanto una parte de la casa que puso allí un pequeño vivero, y las plantas se regaban naturalmente, hasta que se callo el techo… sobre las plantas. Con respecto a la lluvia siempre me acuerdo los versos de Borges: Bruscamente la tarde se ha aclarado/porque cae la lluvia presurosa, cae o callo/la lluvia es una cosa/que ciertamente acontece en el pasado/…
bote inflable y el mameluco amarillo, no queda otra
Publicar un comentario